Receta de caldo gallego con repollo
Este caldo gallego con repollo es una delicia para el paladar. Con una combinación perfecta de ingredientes autóctonos, este plato calienta el cuerpo y el alma. El repollo aporta una textura suave y tierna, mientras que el lacón y la choriza le dan un toque sabroso y especiado. ¡Perfecto para disfrutar en una tarde de invierno!
Ingredientes imprescindibles
¡Prepárate para sumergirte en el mundo de sabores del caldo gallego con repollo! Aquí tienes todo lo que necesitas para triunfar en la cocina.
- Esta hortaliza crucífera – ¡El alma de la receta! Busca uno que esté fresco y crujiente, su dulzura natural hará maravillas en tu paladar.
- Lacón – No escatimes en calidad; un buen lacón es la clave para ese sabor ahumado y reconfortante que nos transporta a Galicia.
- Chorizo gallego – ¿Te atreves con el picante? Este embutido es un festín de especias que despierta todos los sentidos.
- Alubias blancas – Te recomiendo las secas, que con paciencia y amor, se transforman en pequeñas joyas que absorben todo el sabor del caldo.
- Patatas – Ellas son las que dan cuerpo y consistencia. ¿Mi consejo? Déjalas cocer hasta que estén tiernas pero firmes.
- Grelos o nabizas – No pueden faltar estas hojas verdes, que aportan frescura y un colorido vibrante a tu plato. Si no los encuentras, prueba con espinacas o acelgas, ¡experimentar es vivir!
Antes de que el caldo comience a burbujear, es esencial preparar adecuadamente cada componente. Aquí te guiaré paso a paso.
- Verduras – ¡Tu toque personal empieza aquí! Lávalas con mimo bajo el grifo, retirando cualquier resto de tierra o impurezas. Después, córtalas en trozos no muy grandes; así, se cocinarán de manera uniforme y liberarán todo su sabor.
- Carne y alubias – Aquí es donde la paciencia es virtud. Si te has decidido por alubias secas, recuerda ponerlas a remojo la noche anterior; tu esfuerzo se verá recompensado con su textura perfecta. En cuanto al lacón, si es muy salado, déjalo desalando en agua desde la noche anterior también. Yo suelo hacerlo así para asegurarme de que el sabor sea el ideal, ¡sin sorpresas saladas!
¡Es hora de que tu cocina se llene del delicioso aroma del caldo gallego con repollo! Aquí te contamos cómo conseguir una cocción perfecta.
- Preparación con la carne y las alubias – Empieza por poner las alubias (ya remojadas) y la carne en una olla grande. Cúbrelos con agua fría y llévalos a ebullición a fuego alto. Cuando empiece a hervir, reduce el fuego a medio-bajo y deja que se cocinen durante aproximadamente 1 hora. ¡Recuerda! El secreto de un buen caldo es la paciencia.
- Agregar las verduras y el repollo – Pasado este tiempo, añade las verduras previamente limpias y cortadas a la olla. Deja cocer todo junto durante 15 minutos más. Por último, incorpora las tiras ya preparadas y deja que se cocinen durante otros 15-20 minutos, o hasta que estén tiernas. ¡Listo! Ya tienes tu caldo gallego con repollo listo para servir.
¡Ahora que has preparado este delicioso caldo gallego, es hora de pensar en los acompañamientos perfectos!
- Pan ¿Qué mejor manera de disfrutar que mojar pan en él? Elige un pan de calidad, como un pan de masa madre o un pan gallego, y disfruta de cada bocado.
- Embutidos gallegos – Si quieres darle un toque extra a tu plato, no dudes en añadir algunos embutidos gallegos. Un poco de chorizo, lacón o incluso un trozo de queso curado puede marcar la diferencia. ¡Experimenta y encuentra tu combinación favorita!
Recuerdo cuando era niña y mi abuela me enseñaba a preparar el caldo gallego. Siempre decía que el pan y los embutidos eran esenciales para disfrutar de la experiencia completa. Y tenía razón, ¡es la combinación perfecta!
No olvides que puedes variar los acompañamientos según tus preferencias o lo que tengas en la nevera. Por ejemplo, si no tienes pan, puedes utilizar galletas saladas o incluso patatas fritas. ¡El caldo gallego es muy versátil y se adapta a tus gustos!
Receta
Caldo gallego con repollo
Tiempo de preparación: 2 horas
Una elaboración tradicional con repollo que te transportará a la cocina de una casa rural en Galicia.
Ingredientes
- 200 g de alubias blancas
- 200 g de lacón
- 1 oreja de cerdo
- 1 chourizo gallego
- 1 cebolla
- 2 dientes de ajo
- 1 pimiento verde
- 1 patata
- 1/2 repollo
- 1 zanahoria
- 1 ramita de perejil
- Sal y pimienta negra
Instrucciones paso a paso
- Si utilizas alubias secas, ponlas a remojo la noche anterior. Al día siguiente, escúrrelas y colócalas en una olla grande con el lacón, la oreja de cerdo y el chourizo. Cubre con agua fría y lleva a ebullición.
- Mientras se calienta, pica la cebolla, los ajos, el pimiento verde y la zanahoria en trozos no muy grandes. Incorpora los ingredientes a la olla en cuanto comience a hervir.
- Deja cocer a fuego lento durante 1 hora y media, o hasta que las alubias estén tiernas. Añade sal y pimienta negra al gusto.
- Pasado este tiempo, pela y corta la patata en dados y añádela a la preparación. Limpia, córtalo en tiras y agrégalo también.
- Deja cocer otros 20 minutos, o hasta que la patata y este estén tiernos. Rectifica el punto de sal si es necesario.
- Retira el lacón, la oreja de cerdo y el chourizo de la olla. Deshuesa el lacón y la oreja de cerdo y corta la carne en trozos. Corta el chourizo en rodajas.
- Sirve el caldo en platos hondos, repartiendo las verduras y la carne entre ellos. Espolvorea con perejil picado y acompaña con pan casero.